La dirección del inmueble sigue recibiendo cartas de los fans de las aventuras de Kevin, pero se decepcionarían si vieran que, en realidad, no se trata del mismo edificio.
El cine y sus trucos a veces nos juegan malas pasadas: Nueva York es un lugar plagado de emplazamientos cinematográficos: el hotel Continental de John Wick, la estación de bomberos de Los Cazafantasmas... Sin embargo, un lugar que no vas a poder visitar es la casa donde Kevin McCallister plantó cara a los Cacos Pegajosos en Solo en casa 2: Perdido en Nueva York.
La película de 1992 sacó todo el provecho de la cinta original y llevó al personaje de Macaulay Culkin a la Gran Manzana, donde encontraría de nuevo a los infames Bandidos Mojados, ahora rebautizados por Marv como Cacos Pegajosos. Por desgracia, también descubrió su plan para atracar una juguetería en Nochebuena, por lo que no podía quedarse de brazos cruzados.
Puede que en Solo en casa 2: Perdido en Nueva York no tuviese su lujosa mansión de Chicago para usar como arma contra los villanos, pero las conexiones de la familia McCallister le brindaron un ruinoso adosado en 51 West 95th Street, en el Upper West Side. Nunca una casa en obras dio tanto juego.
Como la dirección del inmueble se ve claramente en la película, durante años, los propietarios han recibido cartas de los fans, tal y como destaca Daily Mail con motivo de que la casa esté en venta por nada menos que 6,7 millones de dólares.
Una dirección engañosa para los fans de Solo en casa 2
Si eres fan de Solo en casa y su primera secuela y cada año haces revisionado reglamentario de estos dos clásicos navideños, es mejor que, si planeas un viaje a Nueva York, no te hagas ilusiones con encontrar la icónica casa en el 51 West 95th Street, ni siquiera reformada.
Si bien la dirección es la de una casa real que comparte ciertas semejanzas —es un adosado con escalinata delantera—, no es el mismo edificio que viste en la película de 1992.
De hecho, esa parte de Solo en casa 2: Perdido en Nueva York se filmó en la otra costa, en Los Ángeles, en Brownstone Street, dentro de los estudios Universal.
Puede que la decisión de que la ubicación no estuviese en una casa real fuese lo más acertado: la casa de la primera película ha sido objetivo de los fans desde hace décadas, como prueba que hasta Google retirase el recorrido de Street View que pasaba por delante. Con Solo en casa 2: Perdido en Nueva York, no existe ese problema.
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