Los 10 juegos que deberías probar en modo difícil para disfrutarlos todavía más
Quizá te parezcan demasiado sencillos o crees que lo has visto todo, pero no te confundas: estos 10 videojuegos ganan enteros si se juegan en modo difícil. Eso sí, prepárate para pasarlo realmente mal en tu PC, PlayStation, Switch o Xbox.
La dificultad es un factor vital a la hora de hablar de videojuegos. Hay juegos fáciles, experiencias más equilibradas y auténticos dolores de muela, aunque en la mayoría de los casos es algo que podemos modificar.
Ciertamente, hay juegos difíciles por naturaleza como Ninja Gaiden, Nioh o Cuphead, del mismo modo que hay otros asequibles y que pueden disfrutar casi cualquier persona. Un gran ejemplo es Animal Crossing New Horizons.
Pero, ¿y si un juego mejora si elevamos la dificultad? No es demasiado común, pero existen algunos títulos que ofrecen una experiencia más realista y apropiada en estos modos de dificultad.
Ojo, no queremos decir que sea mejor jugarlos así. Entendemos perfectamente que no apetezca darle caña a Fallout New Vegas en modo Hardcore (supervivencia en el Mojave), pero es una modalidad que representa de forma realista la temática del juego en cuestión.
En tu mano está si jugarlos en modo difícil o no, pero ciertamente estos videojuegos ganan enteros cuando se juegan en difícil o el modo equivalente. Si no nos crees puedes probarlo tú mismo.
10 juegos que deberías jugar en modo difícil:
- XCOM: Enemy Unknown
- God of War (2018)
- Fallout 4
- Doom (2016)
- Alien Isolation
- The Evil Within
- Devil May Cry 5
- Final Fantasy VII Remake
- The Last of Us Parte I y Parte II
- Resident Evil 7
XCOM: Enemy Unknown
La legendaria saga de estrategia XCOM regresó en el año 2012 con un excelente reboot para PC y consolas. Hoy en día es posible jugarlo en consolas actuales, y no se puede negar que es un genial RTS de ciencia ficción, donde importa mucho el rigor táctico y la disposición de tus tropas.
Si quieres disfrutar del título de 2K al máximo nivel, te recomendamos jugar en dificultad Imposible. Si le sumamos el ajuste Ironman, nos topamos con una IA implacable, un solo slot para guardar, menos potencial para el bando XCOM y el modo Second Wave. Vamos, una pesadilla de las que se disfrutan.
God of War (2018)
Quizá el genial reboot de Kratos y su hijo Atreus no sea la entrega más difícil de la saga (ahora estamos esperando Ragnarok), pero tienes que probarlo en su modo más alto de dificultad. Eso sí, os recomendamos primero terminar la aventura en fácil o normal, antes de adentraros en el infierno.
Hablamos del modo de dificultad Give Me God Of War, que básicamente convierte a los enemigos en máquinas de matar. No solo eso, sino que pasarán a ser Elites en un par de golpes. A eso súmale que te hacen más daño y los efectos de estado son más puñeteros.
Fallout 4
La verdadera experiencia Fallout. Los fans más nostálgicos encontraron en este modo un glorioso reencuentro con la esencia de la franquicia RPG. Si en New Vegas teníamos el modo Hardcore, Bethesda tomó nota y en Fallout 4 implementaron el conocido como modo Supervivencia.
¿En qué consiste Supervivencia? Despídete de tu servoarmadura ilimitada y la munición casi infinita. Fallout 4 se convierte en un juego de supervivencia donde no se puede guardar (a menos que duermas 1 hora como mínimo), los enemigos son implacables y además deber comer, beber y curarte manualmente.
Doom (2016)
No hay duda de que el reboot de Doom fue un glorioso (y sangriento reencuentro) con la saga shooter de id Software. Realmente no fue un título difícil, pero las cosas se ponen serias si seleccionamos el modo Ultra-Pesadilla. Encontraremos una experiencia a la vieja usanza y un juego muy difícil.
Para empezar, en este modo de dificultad no podemos guardar y si morimos empezaremos desde el principio. Los enemigos son mucho más poderosos y resistentes, y no es tan sencillo conseguir munición y botiquines. Doom (2016) se convierte en una secuela aún más fiel de los dos primeros.
Alien Isolation
El survival horror de Creative Assembly ya es una pesadilla en sí mismo, pues escapar del xenomorfo en los oscuros pasillos de la Sevastopol es una odisea. Puede que ya te hayas pasado Alien Isolation, pero quizá no sepas que mejora como el buen vino en su nivel de dificultad Pesadilla.
Si el xenomorfo y los sintéticos ya eran implacables antes, en este modo de dificultad se convertirán en tu peor pesadilla. A esto súmale que no tendrás HUD ni mapa, con apenas recursos y con la oscuridad en tu contra.
The Evil Within
Uno de los mejores juegos de terror de la pasada década. Tanto The Evil Within como su secuela aguardan un oscuro secreto si eres capaz de pasarte el juego en cualquier dificultad. Exacto, ni siquiera el modo difícil te prepara para lo que verás en el modo Akumu. No suena bien, eh...
En Akumu, los enemigos de The Evil Within serán mucho más peligrosos y su IA habrá mejorado, pero no es lo peor de esta modalidad. Básicamente, morirás de un solo golpe (incluso si es autoinflingido), y apenas tendrás munición o armas. El sigilo será tu mejor (y casi único) aliado.
Devil May Cry 5
El excelente hack and slash de Capcom es una fantasía para los amantes de los retos. No hay una única dificultad que podamos definir como ''enfermiza'', pues una vez superamos el juego por primera vez conseguiremos el modo Devil Hunter. Es imprescindible para desbloquear el resto.
Por ejemplo, Heaven And Hell hará que mueras de un solo golpe... pero también afecta a tus enemigos. Dante Must Die cambia los patrones de ataque de los enemigos, e incluye algunas sorpresas. Sin duda, Hell And Hell es el más complicado de todos los modos de Devil May Cry 5.
Final Fantasy VII Remake
Los fans más nostálgicos de Final Fantasy 7 deben probar el remake en dificultad Difícil. Más que un incremento de problemas en sí, esta modalidad incluye una serie de sorpresas que cambian por completo el juego. Quizá sea lo que necesites para encumbrar Final Fantasy VII Remake a lo más alto.
En modo Difícil, desaparece el uso de elementos y también la regeneración de salud. Solo podrás curarte en un banco (así como guardar), y necesitas usar manuscritos (hay 44) para mejorar las armas. También hay jefes exclusivos y patrones de ataque únicos, que no están en fácil y normal.
The Last of Us Parte I y Parte II
Puede que la narrativa sea un factor vital para entender The Last of Us, pero todos los juegos de la saga se juegan mejor en dificultades elevadas. Esto es aplicable a The Last of Us Parte I (PS5) y The Last of Us Parte II, aunque también al remaster del primero en PS4 y al juego original de PS3.
Por ejemplo, en dificultad Survivor los enemigos harán el doble de daño, con mejoras de IA, escasez de recursos y sugerencias desactivadas. Sin embargo, el verdadero desafío de The Last of Us te aguarda en Grounded. Di adiós a los puntos de control, el HUD, las armas cuerpo a cuerpo, y da la bienvenida a los enemigos triplemente poderosos.
Resident Evil 7
Quizá Resident Evil 7 fue un cambio demasiado brusco para algunos fans, aunque no se puede negar de la calidad del survival horror de Capcom. Si ya lo has terminado y buscas algo más desafiante (e incluso fiel a los primeros juegos), prueba el modo de dificultad Madhouse. No te arrepentirás.
Es el pico máximo de Resident Evil 7, en el cual necesitarás cintas de guardado como antaño para salvar tu progreso. También tendrás que encontrar coleccionables (monedas) para mejorar las armas y abrir ciertas zonas del caserón de los Baker. Y, por supuesto, los enemigos serán más y mejores.
Estos son los 10 juegos que se vuelven aún mejores si los disfrutamos (o sufrimos, mejor dicho) en modos elevados de dificultad. La cuestión es si serás capaz de pasártelos y no tirar el mando por la ventana.
¿Has probado alguno de estos 10 juegos en modo difícil? ¿Crees que son mejores que en modos más bajos de dificultad? Sea como sea, no dejan de ser excelentes juegos que están entre lo mejorcito de sus géneros.
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