Crítica de Sonic Prime temporada 3: El erizo se marca un Vengadores Endgame en Netflix

Apenas medio año después de que disfrutáramos la segunda tanda de episodios, los amigos de Netflix han hecho llegar la tercera temporada de Sonic Prime, una serie que deja muy buenas sensaciones en su conjunto, pero que ha ido erosionándose, al menos en su narrativa, poco a poco.

El argumento retoma la acción justo después de ese cliffhanger tan loco: con Nine (el Tails alternativo de Nueva Yugork) llevándose todos los fragmentos para crear un mundo nuevo, él solo, desde ese nuevo entorno que es el Gris. Pero, para hacerlo, tendrá que despedazar poco a poco los otros mundos existentes...

Así pues, los 7 episodios (de unos 25 minutos de duración, cada uno) se centran en esa lucha desesperada de Sonic y sus aliados para frenar a un desquiciado Nine antes de que acabe con todo. Esta vez, tanto los Eggman del Consejo del Caos como Shadow tienen que tomar cartas en el asunto frente a un enemigo inesperado.

Por ello, tal y como decíamos en el titular, da la sensación de que toda esta temporada es el equivalente de Vengadores Endgame de la serie, con dos enormes ejércitos (Sonic y sus aliados de todos los universos de un lado y Nine y sus robots por otro) enfrascados en una descomunal batalla campal.

Lo cierto es que, durante los primeros episodios, esto hace que la acción sea intensa y emocionante, con duelos y carreras a la desesperada que os pondrán al borde del sofá. A ello ayuda, por supuesto, que la serie sigue siendo muuuuy espectacular visualmente, gracias a su colorido, sus juegos de cámaras y algún ralentizado que haría aplaudir a Zack Snyder.

El problema es que, en realidad, no pasa mucho más que esta batalla en el conjunto de los episodios. No conocemos más universos alternativos ni personajes extra, aunque hay alguna bromilla con personajes de relleno que tiene su gracia.

El humor, por cierto, sigue estando ahí, pero con bastante menos densidad y, sobre todo, con menos gags efectivos que en el pasado, mientras la épica ha ido ganando terreno. Una épica para niños, por supuesto, aun con algún momentillo dramático.

La verdad es que las diferentes peleas, salvaciones por sorpresa y explosiones hacen que hasta no llegue a importante que, en realidad, el argumento sea tan plano, porque apetece poner el piloto automático y dejarte llevar. Aún así, todo tiene un límite y llega a saturar un poco ver a Nine estallando de furia y los demás combatiendo sin parar.

Al margen de los acontecimientos, los personajes siguen estando muy bien reflejados y todos tienen su momento para brillar, desde Knuckles hasta Amy o un Shadow cuyo carisma de tipo duro lo invade todo cuando aparece.

El mejor, cómo no, es Sonic, que con su nobleza y valentía resulta muy motivante (vuelven a proyectarse los mensajes del esfuerzo y, sobre todo, de la amistad y el trabajo en equipo) e incluso se nota cómo ha madurado en esta nueva tanda de episodios.

No queremos terminar sin alabar, una vez más, el magnífico doblaje al castellano, con mención especial para Ángel de Gracia como Sonic, Graciela Molina como Nine y Manuel Gimeno como Shadow. Da gusto oírlos en acción.

Por lo que se ve en el capítulo final, este bien podría ser el final del viaje, pero no se cierra del todo la puerta a nuevas posibilidades. En cualquier caso, la serie necesitaría un cierto cambio de aires para volver a resultar fresca.

Con todo y aunque argumentalmente esta es la más floja de las tres temporadas, estamos contentos con Sonic Prime, una serie que puede agradar tanto a fans de la mascota de SEGA en general (hasta los que tengan canas o ya nada que peinar) como a lo chavales que quieran buena acción con los pelos de punta. Aquí tendrán más intensidad que comiendo un perrito con chile.