Crítica de The Witcher temporada 2, que corrige algunos defectos de la primera y se vuelve más dramática
Crítica de la segunda temporada de The Witcher, de estreno en la plataforma Netflix el próximo viernes 17 de diciembre con ocho nuevos episodios.
Llegó el ansiado momento de reencontrarnos con el lobo blanco de la mano de Netflix. Después del exitazo de la primera temporada de The Witchery de su estupenda precuela animada La pesadilla del lobo, es el turno de la segunda temporada de la "serie madre" para ver la luz y lo ha hecho de una forma muy especial, con una premiere en Madrid que ha contado con la presencia de Henry Cavill.
Serán ocho los nuevos episodios que compondrán esta nueva tanda titulados "A Grain of Truth", "Kaer Morhen", "What Is Lost", "Redanian Intelligence", "Turn Your Back", "Dear Friend" y "Voleth Meir".
El título del octavo episodio es top secret y, por supuesto, no lo hemos visto todavía, solo nos han provisto de los seis primeros para realizar esta reseña... Hasta el día 17 de diciembre, nos toca esperar.
Lo que sí sabemos es que ha sido la propia showrunner de la serie, Lauren Hissrich quien ha escrito ese episodio final y que se encargará de dirigirlo Ed Bazalgette (The Last Kingdom) que también se hará cargo del quinto. Como es evidente, es de esperar que esté lleno de sorpresas y links con próximas producciones de este mismo universo ficcional.
La segunda temporada de The Witcher comienza en el momento exacto en el que se quedó la primera: Geralt da por muerta a Yennefer tras la batalla de Sodden, lo que lo deja abatido y se lleva consigo a Cirilla, a quien está dispuesto a proteger a toda costa (recordemos que su relación quedó afianzada después de que Geralt invocara la Ley de la Sorpresa).
Ambos tendrán que aprender a convivir: Geralt está acostumbrado a actuar por libre y encuentra algo impertinente a la princesa mientras que ella trata de zafarse de su tutela y rearfimar su identidad.
Tras recalar en el palacio de su amigo Nivellen, pondrán rumbo a Kaer Morhen, el único hogar que recuerda el brujo y al que va periódicamente a descansar, donde se encontrará con Vesemir y Ciri empezará a recibir un entrenamiento para poder defenderse por sí misma... y de sí misma, con el paso del tiempo.
Entre tanto, Yen, que participó en el defensa de los Reinos del Norte junto a otros hechiceros y magos para proteger el paso estratégico de Sodden Hill y evitar así el paso de Nilfgaard, despierta apresada.
Recordemos que cuando todo parecía perdido, Tissaia de Vries la empujó a desatar el caos, con lo que consiguió diezmar al ejército nilfgaardiano. Tissaia la buscará sin éxito mientras que ella se verá en manos de Fringilla hasta que los elfos las capturen a ambas. Hasta aquí podemos leer, dado que más o menos todo ello ha quedado insinuado o mostrado en tráilers y clips previos al estreno.
Como punto de partida, The Witcher 2 ya arranca haciendo mejor dos cosas: manteniendo más estable la estructura narrativa, que fue una de las quejas más habituales respecto a la primera temporada y mejorando algo el diseño de producción, aunque tenga todavía mucho que perfeccionar en ese ámbito.
En este sentido, aunque los monstruos que se muestran son bien curiosos por su forma de moverse o de actuar sobre los humanos (la lamia por ejemplo es original e inquietante), se tiende siempre a luchar contra ellos de noche, en planos muy oscuros y en los que la fotografía no nos permite disfrutarlos al ciento por ciento.
Otras criaturas, como el hechizado Nivellen, no resultan demasiado creíbles y, en general, las caracterizaciones van algo forzadas, sobre todo con el tema de protésicos y pelucas, algo que ya "cantaba" en la primera temporada.
Las revelaciones están bien dosificadas a lo largo de los episodios que hemos podido ver y sigue siendo patente la voluntad de agradar a los lectores de las novelas originales.
Hay más protagonismo para los espacios exteriores imponentes, lo que permite mucho jugar con las hermosas localizaciones de las que se han valido para recrear los reinos y las ruinas que se muestran en la serie.
El casting de The Witcher además se amplía con nuevas caras: Adjoa Ando (Nenneke), Cassie Clare (Philippa Eilhart), Graham Mctavish (Segismundo Dijkstra), Kevin Doyle (Ba'lian), Simon Callow (Codringher) y Chris Fulton (Rience).
Llama especialmente la atención que se haya escogido a Liz Carr para el papel de Fenn, que en las novelas de Andrzej Sapkowski era un hombre, aunque tampoco desentona demasiado.
Lo que podemos aseguraros es que, en el arranque de The Witcher 2, ya se percibe cierta mejoría respecto a la primera temporada y que, a buen seguro, quienes disfrutaron de ella, verán consolidado el compromiso de Henry Cavill con su papel y de la showrunner con el material original, así que tendrán motivos para seguir gozándola.
Seguiremos informando de nuestras impresiones globales y las expectativas que nos deje la serie de cara al futuro cuando podamos ver el desenlace el próximo día 17... Esperemos que esté bien justificado tanto secretismo y que
VALORACIÓN:
La segunda temporada de The Witcher arranca con paso firme, mejorando la experiencia de visionado de la primera temporada, aunque siga teniendo margen para aumentar el nivel del diseño de producción. En general se percibe un giro hacia el dramatismo importante.LO MEJOR:
La estructura narrativa es más asequible y el compromiso de Henry Cavill con el personaje y la obra literaria queda confirmado.LO PEOR:
El diseño de producción sigue siendo muy mejorable, sobre todo al mostrar los monstruos, y las caracterizaciones también.78
Bueno
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